jueves, 16 de julio de 2015

Experiencia Personal como Docente de Aula de Preescolar y Proyección del Doctorado en Educación.


Profesora graduada en Educación Preescolar (2003) y Magíster en Educación Preescolar (2008) de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador en su Instituto Pedagógico Rural Gervasio Rubio; adscrita durante 12 años como docente de aula titular del Ministerio del Poder Popular para la  Educación en Venezuela, en el subsistema de educación básica primaria en la atención pedagógica de niños y niñas desde los dos años de edad hasta los 7 años, representado por los niveles de la Educación Inicial maternal, preescolar y primer grado.
Al momento de iniciar estudios doctorales primeramente doy las gracias a Dios por tener la posibilidad de continuar mi formación académica representado en el enriquecimiento de nuevos conocimientos y experiencias significativas, las cuales favorezcan el desempeño en el aula a favor de los niños y niñas; De igual modo, a mi familia por el apoyo, especialmente a mi esposo quien es mi guía en dicha formación; además a la Universidad Pedagógica Experimental Libertador, Instituto Pedagógico Rural  " Gervasio Rubio" mi casa de estudios, casa de formación docente.
A modo de comprender y poder explicar la proyección personal en función de los estudios doctorales iniciados, es necesario retomar lo realizado en mi tesis de maestría, en la cual llevé a cabo una investigación enmarcada en el paradigma cualitativo bajo el método de estudios de caso, acerca  del Comportamiento del niño  en Educación Preescolar. En la misma obtuve que es la familia quien ejerce la mayor orientación en los primeros años de vida, y modelos de comportamiento social a seguir, así como la formación en valores tales como: el respeto, la solidaridad, entre otros de vital importancia para las relaciones sociales.
En el Estudio la mayoría de las familias desconocía el desarrollo evolutivo del niño y la niña en especial en las áreas sociales y emocionales, lo cual generaba conductas inapropiadas en el aula. Además la totalidad de los sujetos evaluados convivían con familias numerosas y quedaban al cuidado de hermanos mayores o tíos, en aquel momento se propuso unas orientaciones a las familias a fin mejorar los comportamientos de los niños y las niñas.
Con el pasar de los años he observado que siguen llegando nuestros niños con las mismas necesidades, y que además hay mayor agresividad e intolerancia en el aula de clases lo cual genera una serie de problemas ambientales para el desarrollo pedagógico. Dicho esto mi principal preocupación la constituye entonces el estudiar a las familias en su contexto a fin profundizar su influencia en la personalidad y comportamiento del niño, lógicamente esto como una aproximación a un posible objeto de estudio que pueda ser estudiado y comprendido conforme a la realidad del contexto en el que se presenta y de los sujetos que lo viven, y que brinde la posibilidad de ofrecer aportes teóricos que contribuyan a mejorar la labor de la familia y la escuela en la formación de niños y niñas.